Un año sin la mechitas, sin sus crías que
quedaron abandonadas aún con el cordón umbilical, un año sin la negra, sin la
de la mancha en la nariz, sin el blanco del cole y sin otros muchos. Todos
ellos tenían un nombre, una mano humana que les alimentaba y les protegía, un
corazón que sufría por su suerte y unos ojos que han llorado su pérdida.
Y es que está a punto de cumplirse un año de los
envenenamientos de gatos registrados en Alcossebre y casi diez meses de la
denuncia puesta por esta Asociación al SEPRONA. Al poco tiempo los siempre
eficaces servicios del SEPRONA nos indicaron que tenían claras sospechas de
quienes eran los autores pero que carecían de pruebas, y que habían hablado con
el ayuntamiento. ¿Lo saben también en el ayuntamiento? ¿Qué medidas han tomado
con un tema de tan enorme gravedad como es el de particulares que echan venenos
en la vía pública?
Felinos de Alcossebre no olvida y sus
voluntarios aún arrastran el dolor causado por la pérdida de esos seres vivos
por los que habían apostado fuerte, cuidando de ellos durante años a base de
mucha dedicación y enorme esfuerzo. Tampoco olvidamos el dolor de esas personas
cuyas mascotas salieron en un último paseo fatal del que nunca regresaron.
Por eso seguimos pidiendo justicia, estos hechos
tan graves no pueden ni deben quedar impunes. Hemos pedido repetidamente al
Ayuntamiento que se implique contra el maltrato animal, que colabore para la
detención de los culpables y que tome medidas para evitar que vuelva a repetirse
esta barbarie en el municipio, pero hasta la fecha no hemos obtenido nunca esa
imprescindible colaboración.
Sabemos por otra parte, desde que tenemos
conocimiento, que septiembre es un mes crítico para la población felina
callejera, tras un mes de agosto que, a pesar de la gran afluencia turística,
suele ser tranquilo debido a que la mayor parte de los turistas respetan a los
felinos.
Tradicionalmente el Ayuntamiento recurre a la
empresa que tiene contratada dedicada específicamente a la captura y
eliminación de animales callejeros cuando gran parte de los veraneantes se han
marchado, quizás como consecuencia de que durante el verano hay algunas
personas (se podrían contar con los dedos de una mano) que van a quejarse al Ayuntamiento
de y lo que les molestan los gatos libres callejeros. Hacemos hincapié
que por muy insistentes que resulten estos individuos son una ínfima minoría y
no permiten justificar ninguna medida en contra de la población felina.
Hay que tener en cuenta que por cada una de las
escasas personas que se quejan, hay cientos que estamos a favor de la vida y la
utilidad del gato callejero como depredador ecológico, y otros cientos ó miles
a los que la presencia de los gatos les resulta indiferente y por tanto
inofensiva.
Felinos de Alcossebre cuenta con un censo de
gatos callejeros de población estable controlando metódicamente la natalidad.
Todos los gatos tienen nombre y los voluntarios que los atienden conocen
perfectamente a cada uno de ellos y sus costumbres por lo que es muy difícil
que su muerte o captura nos pase inadvertida.
Nuestra prioridad como asociación es luchar por
los derechos de estos seres tan valiosos e indefensos por los que siempre que
sea necesario alzaremos la voz a sabiendas de que la razón y la ley están de
nuestro lado.
Asociación
protectora FELINOS DE ALCOSSEBRE
