Advertimos
que este artículo puede herir la sensibilidad de las personas que no
carecen de ella.
CARTA
DE UNA GATITA DESDE LA ETERNIDAD
Querido
ángel:
No
sufras por mí, ahora estoy en el paraíso con otros que como yo, han
traspasado el umbral.
Recuerdo
cuando me viste aquella noche debajo de un coche, supiste que debías
aparcar el tuyo y acercarte a mí. Lo que temías, no empañé tu
móvil porque ya no respiraba y entonces dijiste “qué vida
asquerosa”.
Te
quedaste a mi lado, triste e impotente, esperando quizás que alguien
se detuviese para compartir tu dolor, pero nadie lo hizo. Y es que
los gatos no somos importantes para muchas personas, somos sólo eso,
gatos, invisibles para la mayoría, sólo hablamos con la gente que
tiene mucha imaginación.
No
me conocías mucho, pero para ti sí era importante. Cuando el hombre
que nos cuidaba dejó de ponernos comida al pie de unos contenedores
en el centro del pueblo, bajé a buscarte porque entre los gatos se
comentaba que dabas bien de comer.
Y
era cierto, cuando te encontraba siempre venías hacia mí con una
sonrisa y una latita apetitosa. Yo comía sin parar mientras tú me
acariciabas el lomo y me decías lo bonita que era.
Pero
no sufras, ahora estoy en el paraíso, aquí no hay coches que van
como locos como el que me atropelló, ni venenos que hacen retorcerse
de dolor, ni jaulas que secuestran para matar. Aquí sólo estamos
nosotros con nuestros buenos recuerdos, felices y tranquilos hasta el
fin de los tiempos.
Gracias,
ángel, por haberme querido y sé que cuidarás de mis pequeños y de
todos los gatos abandonados que encuentres en tu camino.
Hasta
siempre.
- En el año 2018 entre un 10% y un 20% de los gatos callejeros de Alcossebre y un número importante de gatos caseros con vida semilibre murieron reventados en el asfalto por conductores irresponsables, negligentes y asesinos que huyeron sin prestarles auxilio.
- Estamos convencidos de que prácticamente cualquier persona que viva en el pueblo de Alcossebre o turista que pasee asiduamente por sus calles se ha topado alguna vez con este horrible espectáculo. Esto sí hiere realmente la sensibilidad de los que nacieron con ese precioso don.